“Al ver a los tres hombres, Abraham corrió a su encuentro desde la puerta de la carpa, e inclinándose, dijo:
-Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu servidor.” (Gn 18, 2-3)
Según la enseñanza de la Iglesia, fundamentada en la Palabra de Dios, las parroquias son comunidades cristianas presididas por el párroco en las que:
* se celebra el culto divino,
*se vive la misión evangelizadora y
* la comunión fraterna que brota del encuentro con Jesucristo.
Estas finalidades se llevan a cabo con agentes pastorales, nuestra principal riqueza, en tiempos y lugares determinados.
Hablemos de los lugares
Cuándo viene alguien a visitarte a tu casa, si dispones de los espacios adecuados:
¿Lo recibirías en el dormitorio o en la cocina?
¿No lo harías en otro lugar más apropiado?
Así también:
en tu parroquia, son necesarios algunos espacios para recibir cordialmente al que se acerca para hacer alguna consulta o algún trámite, o para conversar con el sacerdote.
Más aún, si la persona que viene quiere reconciliarse sacramentalmente, es necesario que, en el templo, haya un ámbito religioso y reservado donde se pueda celebrar dignamente el Sacramento.
Día a día estamos construyendo nuestra comunidad en número y también en el orden espiritual.
Pero tenemos que seguir creciendo en la construcción de espacios físicos para cumplir las finalidades de toda parroquia.
El lema de nuestra propuesta es:
“¡Te recibo con la cordialidad de Cristo!”
Para que en la nueva etapa que estamos viviendo los católicos en “La Unión” podamos decir esto con más fuerza:
* Necesitamos transformar la actual secretaría en una capilla para la Reconciliación o Confesionario.
* Necesitamos también edificar las dependencias de recibimiento cordial que nos faltan; ellas son:
-la sala de espera,
-el lugar de atención del sacerdote y
-la secretaría parroquial.
* En etapas sucesivas, proyectamos también llevar a cabo una nueva sacristía, más funcional que la que tenemos, yuna capilla doméstica que podrá ser usada especialmente en las misas diarias durante el invierno.
Confiamos en que también asumirás este desafío con el mismo o con mayor entusiasmo.
Presbítero Gustavo M. Fernández Cáceres y Consejo de Asuntos Económicos
No hay comentarios:
Publicar un comentario